La tarde del jueves, Gissella Gallardo compartió en su cuenta de Instagram un video en la playa. Sin embargo, su publicación causó una gran confusión entre los cibernautas, ya que en el texto adjunto confesó que sufre de talasofilia.

Este concepto -poco conocido- tiene que ver con la conexión que sienten algunas personas por los océanos.

Ya les conté que sufro de talasofilia. No hay otro lugar en el mundo en el que encuentre más tranquilidad, más paz, más amor… es mi safe place (lugar seguro), donde soy capaz de encontrarme a mí misma”, redactó la exesposa de Mauricio Pinilla.

Además, añadió: “Siempre he creído que debí haber nacido en un lugar con playa y calor. Algún día me iré a vivir a un lugar así, como quería mi papito“.

¿Qué es la talasofilia? El gran amor de Gissella Gallardo por el mar y la playa

Según el sitio Entorno Turístico, hay que diferenciar la talasofilia mencionada por Gissella Gallardo, de la tasalomanía, pese a que están muy relacionadas.

En ambos casos, las personas evocan las experiencias vividas junto al mar, siendo este el espacio más apropiado para facilitar un estado de meditación. Además, resulta innatamente placentero para los sentidos, lo que facilita también la liberación de la creatividad.

“La talasofilia es el amor intenso y la atracción por los océanos y mares. Le llaman también fiebre o amor del marinero”, indica la página. En efecto, es una conexión mágica que se produce en ese ir y venir del mar, y el placer de estar en la playa disfrutando su inmensidad.

La tasalomanía, por otro lado, “es la fascinación intensa por el vaivén y el sonido del mar. Es la esencia de cambio constante y brinda una sensación de libertad indescriptible”.

Según especialistas, estar dentro o cerca del mar hace más felices a las personas, ya que calma y disminuye notablemente la ansiedad.