Claire Shepherd había conseguido un nuevo trabajo y estaba muy entusiasmada, pero solo alcanzó a estar 30 minutos en su nuevo puesto cuando le anunciaron que estaba despedida.
La razón de la inesperada decisión, tiene que ver con una caraterística de su aspecto físico que, según la compañía, podría resultar ofensiva para el entorno: los tatuajes.
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De acuerdo a lo que reporta el medio británico Daily Mail, el trabajo era en “Dee Set”, un centro de logística y distribución de Reino Unido, donde contrataron a Shepherd luego de pasar una entrevista por teléfono previa.
No obstante, cuando a Claire le llegó un e-mail con los códigos de vestimenta y que indicaba que no podían lucir tatuajes visibles, ella respondió el correo, creyendo que se podía tratar de una política desactualizada, para contar que tenía tatuajes en sus manos pero que esperaba que eso un influyera en su trabajo.
Para su sorpresa, le respondieron que no podían seguir trabajando conmigo porque no podría cubrir los tatuajes de mis manos.
“Tengo seis años de experiencia previa como supervisora y mis tatuajes nunca han sido un problema. Eso hasta que postulé a Dee Set (…) Estoy sorprendida cómo la gente aún puede seguir discriminando a la gente con tatuajes. No creía que eso pasaba todavía. Estoy muy molesta“, fue parte del mensaje de la joven.
