A pesar de que los mismos artistas del tatuaje advierten que hacerse uno de estos dibujos en la piel es una decisión permanente y muy seria, todavía existen personas que caen en una serie de errores. Este fue el caso de la joven inglesa Jess Hardy (23), quien decidió no oír a la primera regla de este mundo: no te tatúes el nombre de tu novio.
Pronto, este pololo se convirtió en su ex, por lo que estaba desesperada por remover el diseño de su dermis. El problema es que el proceso es muy caro (alrededor de $100 mil por cuatro sesiones) y toma tiempo. Es por esto que tomó una decisión aún peor: comprarse su propia máquina de peeling en Internet por 16 mil pesos.
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Como no sabía manipular correctamente la máquina, los resultados fueron escalofriantes: se quemó tan fuerte la piel, que ahora tiene un agujero en medio de su brazo, como recoge el medio inglés de entrevistas BBC Inside Out.
“Se sintió como si alguien hubiera dado vuelta algo inflamable sobre mi brazo, luego lo haya encendido en llamas y luego dado vuelta una tetera encima”, declaró. Sus heridas concuerdan con su terrible descripción.
El dermatólogo clínico, Sean Lanigan, explicó que estos kits para remover tatuajes queman la piel gracias al TCA, un químico corrosivo que está prohibido en la industria cosmética. Existen distintas formas de remover estos diseños de la piel, pero el láser es el más seguro y efectivo y debe ser llevado a cabo por un profesional.
Te dejamos las imágenes de las horribles quemaduras que sufrió Jess para convencerlos de lo peligrosos que son estos kits, ¡no lo intenten en casa!
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