El sexo es, sin duda, uno de los máximos placeres de la vida, pero es mucho mejor aún si lo disfrutamos de manera responsable para no tener que lamentar ciertas consecuencias no muy agradables.
El dejarse llevar por el deseo y la excitación del momento tiene dos lados. Por una parte, puedes vivir una relación sexual mucho más intensa y satisfactoria, pero también tiene su lado más “fome”, pues esta locura puede llevarte a pasar por alto algunos detalles no menores y que pueden terminar dañando la salud de la vagina.
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Según el Instituto Costarricense de Sexología, ambos sexos deben cuidar siempre su higiene sexual antes y después de cada encuentro, y esto va más allá de un tema de impresiones, sino que tiene que ver estrictamente con la salud.
En el caso de las mujeres, es normal que los ginecólogos hable siempre de hábitos de higiene post sexo, pero poco se habla de la parte previa y que también puede implicar ciertos riesgos.
1. Lavarse las manos:
Es común que por la excitación y el deseo de satisfacer rápidamente el instinto carnal, no pongas atención en el lavado de manos, pero debes saber que esta es una de las medidas más efectivas para evitar un sin número de enfermedades, consigna el portal especializado mexicano Salud180.
En este contexto, la médico cirujano y especialista en ginecología y obstetricia, Lourdes Cardona Moreno, señala que en materia sexual uno de los errores más grandes es no lavarse las manos, pues las posibilidades de que se desarrollen infecciones vaginales son muchas.
“Hay que recordar que las manos entran en contacto directo e indirecto con numerosos objetos y personas por medio de los cuales se puede transmitir bacterias, virus, gérmenes y parásitos que provocan graves enfermedades“, señala.
2. Infecciones bucales:
Puede ser una de las prácticas más placenteras, sin embargo, realizarlo cuando se tiene alguna infección en la boca puede poner en alto riesgo la salud vaginal.
En esa línea, el Instituto Costarricense de Sexología, advierte que nunca se debe tener sexo (oral, vaginal, anal) con personas que tengan llagas, brotes, o irritaciones tanto la boca como en los genitales.
3. Penetración sin lubricación:
La ausencia de lubricación en la vagina puede provocar un gran dolor e insatisfacción durante el coito, y lejos de pasarlo bien la mujer puede acabar con serias lesiones o irritación.
La especialista señala al respecto, que el preludio amoroso es la situación ideal para que se produzca una lubricación adecuada, y sino es así, se puede recurrir a un lubricante externo. De todas formas, hay que poner ojo porque también podría ser indicativo de que algo no anda bien en la pareja o se está perdiendo el interés.
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Posted by Página 7 on sábado, 7 de noviembre de 2015
