Otis Johnson estuvo preso durante 44 años tras ser acusado de intentar asesinar a un policía. Después de cumplir su condena, el hombre de 69 años se tiene que enfrentar a un mundo totalmente distinto al que dejó.
Fue en 1971 cuando Johnson fue encerrado. Las cosas, la rutina, las calles, todo era distinto por aquellos años. Así lo reveló Otis en una entrevista publicada por Al Jazeera donde comentó algunos de los cambios que más le sorprendieron.
Mientras caminaba por Times Square, Nueva York, Johnson se mostró confundido ante tanta tecnología. Peatones “que hablan a sí mismo”, personas “con cables en sus oídos” para escuchar música y que los hace lucir como “agentes de la CIA”, además de gigantes letreros de neón, son algunas de las asombrosas novedades que le llamaron la atención, consignó el portal de noticias La Tercera.
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“Mi reentrada fue difícil al principio, porque muchas cosas habían cambiado. Vi que todos se hablaban a sí mismos, pero luego me di cuenta que tenían cosas en sus oídos, y hacían algo en eso llamado iPhone, o lo que sea”, expresó Johnson en la entrevista.
“Algunos ni siquiera ven donde caminan, y estoy tratando de entender cómo lo hacen para controlarse al mismo tiempo que caminan y hablan en el teléfono, sin siquiera ver donde van. Fue impresionante”, agregó.
Otras novedades que le han llamado la atención son las cosas “locas” que se pueden encontrar en los supermercados, además de los “líquidos de colores” refiriéndose a las bebidas energéticas. “Sólo las tomo porque es divertido”, aseguró.
A pesar de haber perdido el contacto con su familia a fines de los 80, y de encontrarse solo en este vertiginoso mundo, está feliz de estar nuevamente libre.
Respeto a su porvenir se muestra optimista y tranquilo. “Estoy dejando ir las cosas y trato de enfrentarme al futuro en vez de quedarme en el pasado. Trato de ir adelante, no hacia atrás. Es la forma en que sobrevivo en esta sociedad”, sentenció.
A continuación les compartimos la intensa entrevista a este valiente hombre:
