Este viernes la familia real de Inglaterra estuvo de fiesta. Lo anterior, puesto que la princesa Eugenie, nieta de la reina Isabel II, contrajo matrimonio con Jack Brooksbank en una hermosa ceremonia en Windsor.
Al igual que el príncipe Harry y Meghan Markle, la pareja se casó en la capilla St. George frente a aproximadamente 800 invitados.
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Y, como es costumbre en cada matrimonio real, el vestido de la novia es uno de los temas que más llama la atención de la prensa.
Eugenie usó una hermosa prenda de la firma Peter Pilotto, elaborada exclusivamente para ella por el diseñador del mismo nombre y Christopher De Vos, según consignó la revista Elle.
El vestido destacó por su gran escote en la espalda y por los bordados de flores en la tela, las cuales escondían un gran significado para la novia: el cardo de Escocia, donde los novios acostumbran pasear; el trébol de Irlanda, haciendo un guiño a su familia materna; y la rosa, que representa la casa de York.
Sin embargo, su vestido no fue lo único que se robó la atención de los medios, sino que también un pequeño detalle en su look con el que rompió el protocolo de las bodas reales: no usó velo.
Este accesorio es tradicional y lo llevó Diana de Gales, Kate Middleton y Meghan Markle en sus respectivas bodas. No obstante, la joven princesa decidió dejar de lado este clásico accesorio.
Cabe mencionar que a la boda asistieron diversos personajes del mundo del espectáculo, entre ellos, la actriz estadounidense Demi Moore, el cantante británico Robbie Williams y las supermodelos Kate Moss, Naomi Campbell y Cara Delevingne.
