Las pastas deben ser una de las comidas más apetecidas por todo el mundo, incluso por aquellos que no las suelen consumir debido a su “mala fama” en cuanto a las calorías.
Y en la realidad chilena esta afirmación se comprueba día a día. Resulta que la participación de las pastas crece cada año en el mercado nacional, abriendo paso a una industria que ofrece con mayor frecuencia más variedad y donde se ha destacado la aparición de categorías con sabores premium.
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Las pastas son un alimento versátil, fácil y rápido de cocinar, no obstante, en la actualidad, los chilenos están abiertos a probar platos cada vez más refinados, incluso en la puerta de su hogar.
Es posible encontrar a la pasta en el menú de la gran mayoría de los hogares chilenos. Su consumo no se vincula únicamente a una especialidad de la gastronomía italiana, sino que, muchas veces, es considerado como un plato ya establecido en la cocina criolla.
Tanto es el fanatismo en el país por este tipo de alimento que, tal como lo señaló la International Pasta Organisation este 2018, Chile ocupa el quinto puesto, junto con Argentina, en el ranking de los países que más consumen pasta a nivel mundial, con 9,4 kg per cápita al año. Este listado lo lideran Italia, con 23,5 kgs, y Túnez, con 17 kgs anuales.
La popularidad de la pasta también traspasó las fronteras de la tecnología, donde ha logrado posicionarse en el comercio electrónico como uno de los platos preferidos a la hora de pedir a domicilio, variando en sus preparaciones para conquistar hasta los paladares más exigentes con la variedad gourmet.
“En estos momentos contamos con un total de 850 restaurantes restaurantes y locales suscritos en nuestro catálogo. Estábamos conscientes de lo importante que es la pasta en la dieta de los chilenos, por lo que nos esforzamos día a día en entregarles las mejores opciones junto a la mejor calidad. Esto lo hemos visto en nuestros usuarios, que han descubierto lo variado de nuestra oferta, y cada vez están más dispuestos a probar nuevas experiencias”, señaló Juan Manuel López, managing director de la plataforma de ‘delivery’ PedidosYa.
Si bien la pasta se consume hace décadas en nuestro país, su compra aún sigue en auge. Según la consultora internacional Euromonitor, durante el 2016 y 2017 las ventas asociadas a productos como arroz, pasta y fideos aumentaron un 11%. Dicho estudio precisa que este efecto en el mercado se debió principalmente a la introducción de diferentes marcas premium, lo que aumentó tanto la calidad como la competencia por ofrecer productos con mejores facultades.
Además, las proyecciones relacionadas con este producto continúan siendo alentadoras. El año 2017 Euromonitor estimó que el gasto total de los chilenos en pasta podría subir hasta US$302 millones para el 2021. No obstante, esta cifra de gasto monetario se centra principalmente la priorización de productos de mayor calidad antes que cantidad. Esto quiere decir que los chilenos están dispuestos a pagar más y optar por productos con mejores cualidades.
Esta misma tendencia se ha hecho patente en la industria del delivery a domicilio, donde la compra de platos gourmet se consolida como una opción que facilita la variedad de consumo, y que se encuentra al alcance de la mano de los clientes. “Dentro de los platos más populares que recibimos en las órdenes de nuestros usuarios están lasagna, ñoquis y fetuccini. Suelen incluirlo con alguna venta cruzada, donde lo solicitan con pizzas, empanadas o postres italianos como el tiramisú para compartirlo con la familia o alguien especial”, concluyen desde PedidosYa.