Este lunes se llevó a cabo una nueva versión de los British Fashion Awards, ceremonia que premia a los mejores de la industria de la moda británica.
Y una de las que más llamó la atención en esta premiación, fue la aparición sorpresa de la duquesa de Sussex Meghan Markle, quien impactó con una abultada guatita de embarazo.
También puedes leer
Pero eso no fue todo, pues también los más atentos notaron un particular detalle en sus manos con el que ha roto nuevamente el protocolo. Resulta que la esposa del príncipe Harry Markle optó por lucir sus uñas con una manicura en tonos oscuros, prácticamente negro, que combinaba perfecto con su look de noche, pero que no estaría permitido por las normas de la realeza británica.
De acuerdo consignó la revista OKMagazine en octubre de 2017, las reglas de protocolo de la familia real, indican que las mujeres deben andar con las uñas sin pintar o con colores naturales.
Cabe señalar que la reina Isabel II usa el mismo esmalte color rosado de la marca Essie desde 1989. La misma norma corre para los labiales, los deben ser de colores neutros, suaves o rosados, lo fundamental es que sean poco llamativos.
El vestido escogido por Meghan también provocó comentarios, pues estaba más cerca a un atuendo de estilo hollywoodense que al de una duquesa.
Meghan de Sussex llegó hasta el Royal Albert Hall de la capital británica para otorgar el premio a la “mejor estilista británica del año en colecciones de mujeres”, a la directora artística de Givenchy, Clare Waight Keller. Misma firma que diseñó el vestido de novia de la duquesa.
“Es todo un placer estar aquí para celebrar la moda británica”, declaró la exactriz, celebrando la “visión”, la “creatividad” y la “increíble amabilidad” de Waight Keller.