Algo único y prácticamente nunca visto en la medicina actual. Esto porque una mujer de Reino Unido vivió el fenómeno de la superfetación, que es quedar embarazada cuando ya se está embarazada.
Hace unas semanas se dio a conocer el caso de Beata Bienias, quien tras meses intentando quedar embarazada, decidió someterse a una fecundación in vitro. Pese a que lo había intentado muchas veces con su marido, el sobre peso que tenía y un síndrome de ovario poliquístico, le impidió cumplir su sueño.
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Según lo consignado por el portal británico Daily Mail, los médicos de Beata y su esposo Powell le pidieron que no mantuvieran relaciones sexuales los cuatro días previos al procedimiento, para que este fuera exitoso. Sin embargo, al tener muy bajas expectativas, no cumplieron con este requisito.
Pese a que desconfiaban que ella quedaría embarazada, ocurrió todo lo contrario, y de una manera que no imaginaban. Les informaron que serían padres de tres hijos: “Los dos estábamos en shock y miramos el monitor con incredulidad”, explicó esta mujer.
Debido al particular resultado, los médicos realizaron varios estudios para confirmar el diagnóstico. Fue así como se enteraron que uno de los óvulos fertilizados in vitro se había implantado en el útero, mientras que los otros dos lo habían hecho de manera natural.
Si bien es algo muy poco común, la superfetación es algo posible: “Sucede muy raramente (…) Muchas personas que buscan la fertilización in vitro tienen dificultades para quedar embarazadas”, explicó la gineco obstetra Christine Greves.
Fue así como tras pasar un embarazo con total normalidad, el pasado 13 de diciembre nacieron Amelia, Matylda y Borys, sin ningún tipo de problema: “Se trata del milagro más grande que podía sucederme, nunca pensé que algo tan increíble pudiera pasar”, reflexionó esta orgullosa madre.
