Con la llegada de diciembre, muchos ya han empezado a sacar los adornos y el ‘arbolito’ para decorar el hogar con todo lo relacionado a Navidad. Pero eso se traspasa a las oficinas y las calles, que se llenan de figuras de viejitos pascueros, hombres de nieve y duendes.
Pero como todo en esta vida tiene una historia, en Página 7 quisimos buscar el origen de algunas de las tradiciones típicas de esta época. Si bien hay varias que son muy propias de Estados Unidos o países europeos, en Chile hemos replicado varias y te dejamos algunas.
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Árbol de Navidad
Todo parte con el árbol, pequeños o grandes, pero siempre hay un pino en los hogares decorados para esta festividad. Pero ¿cómo nace? Según el portal de History Channel, todo parte con los romanos en los festivales de invierno. Allí se decoraba con árboles, ramas y coronas en una festividad llamada Saturnalia, que es un festival de seis días que homenajeaba al dios agrícola Saturno.
Ya para el siglo XIX, era más común el uso de este tipo de decoraciones. ¿Cuándo se hizo popular? La Reina Victoria y el Príncipe Alberto, en 1848, optaron por tener un ‘arbolito’ en las épocas navideñas. Como en Estados Unidos miraban las tendencias reales, llegó a Norteamérica.
De hecho, a principios del siglo XX “solo una de cada cinco familias en los Estados Unidos lucía un árbol de Navidad; en 1930, la costumbre era casi universal”. Para 1931, el Rockefeller Center de Nueva York instaló su primer pino y, de ahí, el resto es historia.
Adornos navideños
Y si habían árboles, ¿a quién se le ocurrió ponerle adornos? Antiguamente se le colocaban manzanas, figuras hechas de papel y hasta muñecas. En 1880, la tienda FW Woolworth lanzó en Estados Unidos unos adornos de vidrio exportados de Alemania, que ayudaron a darle luz al árbol.
En la misma época, se agregaron velas, pero como provocaban incendios, se optó por sacarlas como decoraciones. No fue hasta 1900, gracias a los inventos de Edward Johnson, colaborador de Thomas Edison, que se crearon las primeras luces navideñas eléctricas.
¿Y por qué todo es rojo y verde?
Aunque hay mucho debate respecto a este punto, todo indicaría a que se trataría de un factor comercial. Los colores rojo y verde se remontan a las celebraciones del solsticio de invierno de los romanos (recordemos que el origen de la Navidad es católica), con el paso del tiempo se volvieron muy típicos los azules y amarillos, por la inclusión de la figura de San Nicolás.
¿Y cuándo cambió todo? En 1931, Coca-Cola impulsó un marketing masivo con la clásica figura de un ‘Santa Clauss’ rojo y blanco, al menos así logró popularizarse: “Se solidificó en nuestra imaginación colectiva el rojo de las túnicas de ‘Papá Noel’, con el verde de los abetos y el acebo y la flor de pascua que ya teníamos en nuestras mentes (…) Este tono particular de rojo y verde vino a significar Navidad”, explicó Arielle Eckstut, la coautora del libro Secret Language of Color.
El trineo del Viejito Pascuero
Si bien se ha contado muchas veces cómo nació el ‘Viejito Pascuero’ (puedes ver una nota nuestra que lo explica), no todos saben dónde surgió el trineo de ‘Papá Noel’. Para esto debemos ir al libro Historia de Nueva York de Washington Irving, publicada en 1809, que es una de las primeras veces que se menciona en la cultura popular.
Aquí se hace referencia a que el ‘Viejito Pascuero’ está “alegremente entre las copas de los árboles, o sobre los techos de las casas, sacando de vez en cuando magníficos regalos de los bolsillos de sus pantalones, y arrojándolos por las chimeneas de sus favoritos”.
¿Y cómo se movilizaba por el mundo? En 1823, el poema de Clement Clarke Moore Twas the Night Before Christmas decía que “cuando a mis ojos asombrosos sí apareció / Pero un trineo en miniatura y ocho pequeños renos / Con un pequeño conductor viejo tan animado y rápido / supe en un momento que él debe ser St. Nick (San Nicolás)”. El tema se volvió tan popular, que también se creó la idea de que ‘Santa’ tenía una trineo.
Calcetines colgantes
Es posible ver en esta época calcetines o medias decorando nuestros hogares. Muchos incluso los usan para guardar dulces o regalos, pues ese es exactamente el origen de esta tradición.
El libro Peoples of Europe, detalla que antiguamente en los Países Bajos, los niños holandeses llenaban sus zapatos y calcetines con heno y zanahorias, los dejaban en la puerta de su casa, con la esperanza de que ‘San Nicolás’ apareciera para dárselos a sus renos y cambiarlos por monedas y pequeños obsequios.
Esto ocurría cada 06 de diciembre, para el Día de San Nicolás. Para 1823, Moore escribió un nuevo poema que decía que este señor “llenó todas las medias; luego se volvió con un tirón / y apartó el dedo de la nariz / y asintió con la cabeza, subió por la chimenea”. Años después, 1883, según cuenta The New York Times, comenzaron a venderse al por mayor medias largas para seguir con esta tradición.
Villancicos
Para llegar al origen de los villancicos, primero hay que saber que no partieron como cantos navideños. Según recoge la revista Time, en la antigua Inglaterra era muy común que se cantaran temas tradicionales de la música popular cristiana mezclados con villancicos, pero el foco no era navideño.
“En el siglo XIX, a medida que la Navidad se volvía más comercializada y popular, los editores comenzaron a producir antologías de villancicos, muchos de los cuales eran himnos antiguos, que también circulaban en grandes hojas de papel”, recordó la revista estadounidense.
Enviarle cartas al Viejito Pascuero
Esta es por lejos una clásica tradición navideña, que muchos niños aún siguen haciendo. Si bien hoy existe el correo electrónico, aún hay muchos pequeños que escriben cartas pidiendo sus regalos a ‘San Nicolás’.
Pero aunque no lo crean, el origen de esta historia es completamente al revés. Según la revista Time, en la primera mitad del siglo XIX, la figura de Papá Noel era más bien disciplinaria. Entonces era él el que enviaba cartas a los niños, para que se portaran bien, incluso eran los propios padres los que escribían a San Nicolás para contarles cómo se comportaban sus hijos.
En 1871 se comenzó a popularizar en Estados Unidos una imagen en donde se veía a este enorme señor de barba, leyendo los escritos y clasificándolos en dos: ‘cartas de padres de niños traviesos’ y ‘cartas de padres de niños buenos’. ¿Qué empezó a ocurrir con esto? Los pequeños comenzaron a escribirle cartas al ‘Viejito’ advirtiendo que se habían portado bien, y que merecían regalos.
Esto provocó un cambio en las oficinas de correos, que se vieron obligadas a crear una casilla con destino al Polo Norte, para que se enviaran las cartas con deseos. Desde entonces, la historia comenzó a popularizarse en todo el mundo. De hecho, para 1989, Santa consiguió su propio código postal.
