Maura Lewinger y su esposo, al cual ella llamaba cariñosamente “Joe Joe”, se casaron hace un tiempo con la canción The Bones, de la intérprete Maren Morris. Y fue precisamente aquel tema el que ella le cantó a su pareja, justo antes de morir.
El hombre había sido diagnosticado con COVID-19 hace algunas semanas, por lo que fue internado de urgencias en un hospital de Nueva York. Con el correr de los días su condición de salud presentaba leves mejorías lo que le dio algunas esperanzas a Lewinger.
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De hecho así lo compartió ella misma en su cuenta de Facebook. “Hoy se cumplen 8 días desde que mi Joe-Joe fue ingresado en el hospital. Él no tiene ninguna condición de salud subyacente… es un hombre saludable de 42 años, que ahora está tumbado indefenso en una cama de hospital”, manifestaba la mujer.
No obstante, con el paso de los días su respiración comenzó a fallar. “Su sistema respiratorio estaba empeorando lentamente. Estaba agotado y luchando con cada respiración. Era obvio que necesitaba un poco de alivio. El equipo médico decidió intubarlo después de que se volviera aún más angustiado“, relató Maura.
En efecto, el hombre había sido puesto en un coma inducido, con un tubo en la tráquea y con un respirador artificial, explicaba la mujer en sus redes, instando al círculo cercano de “Joe Joe” a rezar por él. Pero la plegarias tampoco sirvieron ya que finalmente falleció.
Pero fue en su lecho de muerte en donde Lewinger pudo cantarle la canción que marcó su historia, mediante una emotiva videollamada, hasta que él cerró completamente sus ojos.
“Mi Joe-Joe y yo teníamos tantas canciones que nos cantábamos el uno al otro y bailamos juntos… esta sin embargo, esta era nuestra historia de vida”, plasmó sus sentimientos en Facebook, en medio del dolor que sentía tras perder a su compañero de vida.
