Luego de una alta expectativa en redes sociales, este 15 de noviembre nació el bebé que se convirtió en el habitante 8 mil millones.

Fue en Santo Domingo, capital de República Dominicana, en donde Damián, quien afortunadamente no tuvo complicaciones de salud ni él ni su madre, llegó a este mundo pesando 2,77 kilos y midiendo 52 centímetros.

Damaris Ferraris, la progenitora de 35 años, dio a luz al niño que para la Organización de Naciones Unidas (ONU) es la “esperanza para que los niños que nazcan en este planeta sean recibidos en condiciones“.

El nacimiento producido en las últimas horas fue más que especial y mantuvo emocionado a todo el hospital de maternidad Nuestra Señora de Alta Gracia, ya que se trata de un hecho histórico para la ciudad, el país y, claro, para todo el mundo.

En ese marco es que la ONU decidió tomar su nacimiento de manera simbólica para bajar un mensaje de esperanza de cara a los nacimientos que vienen.

Significa mucha esperanza para que a todos los niños que nazcan en este planeta los recibamos con condiciones“, dijo en las últimas horas la representante local de la nacional del UNFPA (Fondo de Población de Naciones Unidas), Sonia Vásquez.

La funcionaria explicó que ese objetivo se logrará cuando se cumpla una meta humanitaria ambiciosa y haya “cero muertes maternas, cero morbilidad, cero enfermedades y plena salud”.

Los desafíos tras el nacimiento del habitante 8 mil millones

Como se mencionó antes, eso representa un hito para la historia del mundo. “Da testimonio de los avances científicos y las mejoras que se consiguieron en materia de nutrición, salud pública y saneamiento”, subrayó en las últimas horas António Guterres, secretario general de la ONU.

Desde el organismo dijeron que la población mundial tardó 11 años en pasar de 7000 millones a 8000 millones. De todos modos, estipularon que recién en 15 años, en 2037, el planeta tendrá 9000 millones de personas, lo que representa una baja en el ritmo de crecimiento demográfico.

El peak, de acuerdo a la ONU, está previsto para el 2080, en donde se proyecta 10.400 millones de habitantes y luego un estancamiento de la población hacia finales de siglo.