El trastorno que afecta a una de las hijas de José Miguel Viñuela: lo evidenció en foto en Instagram

José Miguel Viñuela es un asiduo usuario de redes sociales. Todos los días comparte historias o publicaciones, revelando datos de su vida familiar, hijos o de su trabajo.

De hecho, constantemente chochea con sus hijos, evidenciando lo feliz que se encuentra junto a la familia que conformó con Constanza Lira.

En uno de sus últimos posts, el conductor del programa de TV+, Tal Cual, se despidió de sus vacaciones, con foto en compañía de sus cuatro hijos: Diego, Tomás, Clara y Elisa.

En la imagen, fueron algunos de sus seguidores quienes se percataron de que Clarita tenía un parche en un ojo, preocupándose por la menor de edad y preguntando directamente qué es lo que tenía.

“¿Qué le pasó a la hermosa Clarita?”, consultó una usuaria. Viñuela no dudó en responder, despejando dudas sobre su salud. “Se le va un ojito”, señaló el comunicador sin entregar más detalles.

Lo que evidenció Viñuela es que su hija tiene estrabismo. Según señaló a Página 7 el doctor Cristián Sánchez, oftalmólogo infantil de Clínica Santa María, “para lograr una visión binocular con ambos ojos, estos deben estar coordinados y moverse al unísono, comandados por el cerebro. El cerebro controla los músculos del ojo, llamados músculos extraoculares, que constan de seis en cada ojo”.

“Algunos actúan como agonistas y otros como antagonistas, permitiendo el movimiento paralelo de los ojos en todas las direcciones. Cuando hay un desequilibrio en estas fuerzas, los ojos pueden moverse de manera desigual, lo que resulta en estrabismo”, expresó.

En esa misma línea, el experto indicó que “el estrabismo interrumpe la visión binocular, haciendo que el individuo vea con un solo ojo mientras el otro está desviado. Esta desviación puede ocurrir debido a problemas en el cerebro, los nervios, los músculos o la retina”.

Viñuela y posible tratamiento de estrabismo en su hija

El estrabismo es un problema que puede afectar tanto a niños como a adultos. En los niños, puede generar complicaciones en el desarrollo de la visión, siendo el periodo crítico hasta los 9 años, durante el cual el cerebro tiene la plasticidad neuronal para compensar alteraciones visuales.

“Cualquier enfermedad ocurrida antes de los 9 años puede tener repercusiones en la vida adulta, y viceversa. Tratamientos implementados antes de esta edad pueden tener un mayor impacto positivo en la salud visual”, señaló el oftalmólogo.

En cuanto a su tratamiento, aseguró que se enfoca en varios ejes. “Primero, se evalúa si el niño necesita corrección con lentes, especialmente en casos de estrabismos acomodativos asociados con hipermetropía alta”.

“En algunos casos, se utiliza parches en el ojo sano para fortalecer el ojo más débil y prevenir la ambliopía u ‘ojo vago’. Los parches también pueden tener un rol antisupresor, evitando la supresión de la visión en casos de estrabismo intermitente”, agregó.

El experto indicó que si estos tratamientos no son suficientes, se puede considerar la cirugía para corregir el estrabismo, ya sea en uno o ambos ojos, dependiendo de la magnitud de la desviación y el tipo de músculo involucrado. “El tratamiento del estrabismo en niños requiere un enfoque integral que considere tanto correcciones ópticas como terapias de parche y, en casos necesarios, intervenciones quirúrgicas”, añadió.

Cirugía de estrabismo

En cuanto a la cirugía, el experto señaló que es generalmente ambulatoria, con anestesia general en el caso de niños. “La duración de la cirugía depende del número de músculos intervenidos, pero por lo general, no supera la hora y media, ni dura menos de media hora, con una duración promedio de entre media hora y una hora y media”, precisó.

“El postoperatorio implica cuidados especiales, como evitar tocarse los ojos, no tener contacto con el agua para evitar mojar los ojos y el lagrimeo, así como la posible presencia de un poco de sangre en los ojos como resultado de la cirugía”, añadió.

Asimismo, indicó que durante tres semanas, después de la cirugía, se recomienda evitar la actividad física y cualquier acción que pueda comprometer la cicatrización y recuperación. “Además, se prescribe tratamiento con antibióticos y corticoides en gotas, aplicados cada cuatro horas durante dos semanas, para prevenir infecciones y reducir la inflamación”.

En cuanto al tratamiento con lentes y parches, explicó que el uso de lentes es de por vida, mientras que el parche se utiliza hasta que se logra una alternancia del estrabismo, “es decir, hasta que no haya predominio entre un ojo y otro. Esto puede ocurrir una vez resuelta la ambliopía (ojo flojo) o después del periodo crítico de desarrollo visual, que suele ser antes de los nueve años”.

¿Cómo darse cuenta de que un niño tiene estrabismo?

El médico informó que puede haber varias formas de estrabismo. “Si la desviación es grande, puede ser evidente y los padres pueden notarlo, lo que lleva a que lleven a su hijo al médico. Cuando se observa en fotografías o vídeos que un ojo está desviado, puede ser un signo de estrabismo”.

Sánchez precisó que es importante “realizar un fondo de ojo para buscar anomalías en la retina, nervio óptico o medios transparentes del ojo, lo que puede ayudar a determinar la causa del estrabismo”.

Finalmente, explicó que el proceso de diagnóstico puede ser largo y requiere paciencia por parte de los padres, quienes deben acudir con su hijo al oftalmólogo infantil. “Ante cualquier sospecha de estrabismo, es conveniente acudir al oftalmólogo para realizar una evaluación completa y determinar el tratamiento adecuado”, cerró.