Su salida del reality de Mega, Amor a prueba, fue bastante mediática, luego que protagonizara varias polémicas en el encierro.
Recordemos que la rubia fue internada en una clínica de la capital tras sufrir un colapso nervioso producto del bullying que sufrió de parte de sus compañeros en el programa y de su quiebre amoroso con el español Tony Spina.
Luego de salir de la clínica, la enemiga de Adriana Barrientos pasó unos días en Mejillones y posteriormente se fue de vacaciones a Brasil, en compañía de su hijo.
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Fue justamente en su arribo a nuestro país, que varios medios intentaron sacarle declaraciones.
“Lo pasé increíble, cuando yo viajo es para renovarme, fortalecer mis energías y para disfrutar cada momento”, dijo la rubia con respecto a su estadía en Brasil.
Lo que más llamó la atención de sus dichos, fue que aseguró para “para mi nada fue un show” al interior del reality.
Sobre los rumores de que ingresaría nuevamente a Amor a prueba para hacer una actividad, dijo que no son reales, agregando que no está considerada para ello. “Mi sueño es tener algo más estable en TV y animar o coanimar algo. Yo sé que estoy preparada para eso y mucho más”, aseguró Luli al programa de farándula Primer Plano de Chilevisión.
Consultada sobre si estaba mejor, dijo que si “la verdad es que hace tiempo que estoy mucho mejor”, tan así que puedo llegar en cualquier momento a trabajar”. La misma madre aseguró que su hija estaba más tranquila, y si ella lo está, ellos (su familia) también.